El diputado provincial Rubén Giustiniani dijo que la ley de blanqueo que votó la Legislatura "fue un acto de fe del gobernador Miguel Lifschitz hacia la administración nacional" y se mostró crítico hacia la conducción del Partido Socialista (PS).
El diputado provincial Rubén Giustiniani dijo que la ley de blanqueo que votó la Legislatura "fue un acto de fe del gobernador Miguel Lifschitz hacia la administración nacional" y se mostró crítico hacia la conducción del Partido Socialista (PS).
"El debate y la aprobación de la ley del blanqueo la pidió Lifschitz. Claramente fue un acto de fe hacia el gobierno nacional. Pero quiero ser coherente: es importante que el gobernador, el intendente y el presidente de la Nación tengan un buen diálogo", dijo Giustiniani.
"No participo en la conducción del Partido Socialista y, por eso, lanzamos Igualdad y Participación. Soy muy crítico al PS y su conducción", agregó en una entrevista con el programa En Profundidad, de Canal 4 Express Cablehogar.
Según Giustiniani, "la conducción del PS no quiere cambiar y sigue con más de lo mismo". Al respecto, agregó: "Hay que recuperar el diálogo con la sociedad, construir en Rosario una ciudad vivible, con urbanismo, que se pueda desarrollar. Cuando fui secretario de Gobierno municipal no nos alcanzaba el tiempo para inaugurar obras en los barrios. Se burocratizó la gestión".