Estudiantes de un colegio alemán de la localidad bonaerense de Lanús concurrieron con símbolos nazis (brazaletes con esvásticas y bigotes "hitlerianos") a un boliche de la ciudad de Bariloche, donde agredieron a alumnos de una escuela porteña de la comunidad judía.
Tres de los estudiantes que generaron los hechos fueron apartados de su contingente y enviados de regreso a Lanús. Además, deberán hacer frente a distintas sanciones.
Los incidentes se dispararon el martes en la fiesta de disfraces que se realiza en la discoteca Cerebro, una de las cinco del circuito estudiantil, a donde asistieron 1.600 egresados. Tres de los 50 alumnos del colegio alemán (Sociedad Escolar y Deportiva Alemana, Sedalo) asistieron cubiertos con camperas. Debajo llevaban brazaletes con cruces esvásticas y en el interior del baño de la discoteca se pintaron bigotes "hitlerianos" y cruces esvásticas en el cuerpo.
En medio de la fiesta, tres adolescentes provocaron e insultaron a sus pares del colegio ORT (del barrio porteño de Belgrano), según denunciaron padres de los damnificados. Hubo empujones e insultos, aunque no se generaron lesiones.
Personal de seguridad de la discoteca advirtió la pelea y decidió retirar a los dos contingentes. En el exterior continuaron los encontronazos.
La empresa Baxtter, organizadora del viaje de egresados de los dos colegios, decidió sancionar a tres de los estudiantes agresores y mandarlos de regreso a Lanús.
Gabriel Mazzeo, apoderado de Baxtter, precisó que el regreso de los tres chicos "fue acordado con los cuatro padres acompañantes del grupo y los padres de los propios chicos". "Fue una forma de mostrarnos firmes, de no permitir estas situaciones y también para preservar su integridad", argumentó.
La madre de uno de los alumnos de la escuela porteña dijo que los dos colegios viajaron a Bariloche, que se alojaron en diferentes hoteles, aunque linderos, y dijo que su hijo le contó que ya habían tenido problemas con el contingente bonaerense.
"El día anterior habían empezado a provocarlos, sabiendo que eran de la ORT. Les decían cosas, como «judíos de mierda». Los chicos hablaron con los coordinadores, que no le dieron mayor importancia", dijo la mujer.
El presidente de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (Daia), Ariel Cohen Sabban, sostuvo que se reunirá con el intendente de Bariloche y manifestó que el hecho "no es un chiste ni una gracia. Esa simbología refleja una ideología que culminó con 6 millones de judíos asesinados por los nazis".
"Si estos chicos tienen más de 16 años, les puede caber por ese hecho una pena de un mes a tres años de prisión, porque lo que hicieron, en Argentina es un delito", advirtió.
El Instituto Nacional contra la Discriminación, Xenofobia y el Racismo (Inadi) informó que actuará de oficio, por lo que pidió a la empresa operadora del viaje de egresados que "identifique" a los protagonistas para "citarlos" en el marco de la ley antidiscriminatoria.
La directora del colegio de Lanús, Silvia Fazio, dijo que los alumnos serán sancionados, deberán participar de "jornadas de reflexión" y realizar "acciones de reparación de daños, porque no nos alcanza con que pidan disculpas".
"Que muestren con acciones el arrepentimiento", reclamó la directora, quien también cuestionó la falta de acción de los adultos que los acompañaban al expresar que sus "alumnos actuaron mal, pero hubo otros filtros que no funcionaron".
El presidente del colegio alemán, Orlando Rockstroh, afirmó que "si alguno le pregunta a estos chicos, no tienen mucha idea de lo que hicieron". "Algo falló, nosotros hacemos todo los posible para enseñar la cultura alemana verdadera, no la cultura nazi. La cultura nazi no existe adentro del colegio", manifestó, y dijo estar "tranquilo con el trabajo que hicimos, no con el resultado. No vamos a sacarle el cuerpo a lo que pasó".
Preocupante. El intendente de Bariloche, Gustavo Gennuso, consideró que "esto es muy preocupante, sobre todo para los padres y el Estado. Todos debemos tomar cartas en el asunto porque estas cosas no nos pueden pasar", quien se reunirá con Cohen Sabban en Buenos Aires.
El jefe comunal indicó que se comunicó con padres y autoridades de la escuela alemana de Lanús, de la ORT, con el propio Cohen Sabban y los directivos de la Asociación de Turismo Estudiantil de Bariloche (Ateba), y que coincidió "en todo sobre la forma de abordar estas cuestiones".
"Me comuniqué con la directora del colegio de Lanús y dialogamos un largo rato. Ella esta abochornada por el hecho, y coincidimos en que el perdón a los chicos venga con algún tipo de reparación".
Tras los incidentes, los dos colegios acordaron llevar a sus alumnos en conjunto al Museo del Holocausto que funciona en el que fue el edificio de una usina de la Compañía Italo-Argentina de Electricidad, en Montevideo 919 del barrio porteño de Recoleta.