La solicitud del gobierno provincial al gobierno nacional para que se amplíe el número de efectivos federales en Rosario para reforzar las tareas de prevención levantó duras críticas de otros sectores políticos. El diputado provincial Federico Angelini, uno de los principales referentes de Cambiemos en Santa Fe, definió como "un nuevo fracaso" el posible retorno de Gendarmería a la ciudad. De todas maneras, aseguró que "si tenemos que volver a dar una mano, lo vamos a hacer".
El pedido oficial estuvo cargo del ministro de Seguridad santafesino, Maximiliano Pullaro, quien teniendo en cuenta la ola de crímenes y hechos violentos que recrudeció en las últimas semanas le elevó esta inquietud a su par nacional, la ministra Patricia Bullrich, de quien esperan un plan de acción para ejecutar en la provincia.
"Yo no lo veo como una buena noticia que vuelva Gendarmería, porque entiendo que responde a un nuevo fracaso de la política de seguridad propuesta por el gobierno de Santa Fe. Ellos no hace seis que gobiernan, hace ocho años que el Frente Progresista administra la provincia y la situación fue empeorando cada vez más", se encargó de remarcar Angelini.
Más allá de esa lectura, el legislador apuntó que "nosotros vamos a ponernos a disposición para hacer todo lo posible, pero quiero remarcar esta falla del gobierno santafesino, que son quienes tienen la potestad en materia de seguridad en el territorio".
Vale recordar que en la actualidad hay 400 efectivos de las fuerzas federales en la ciudad. Ese grupo incluye a Gendarmería, Policía Federal y Prefectura Naval. Pero, debido al crecimiento de los asesinatos en el último mes, Pullaro solicitó que se aumente el número de agentes para patrullar Rosario.
La intención del gobierno santafesino es que se sumen efectivos al diagrama de brigadas mixtas entre fuerzas provinciales y federales en distintos barrios de la ciudad. Y según trascendió, en las tratativas se puso especial énfasis en mantener los lineamientos de los dispositivos de seguridad actuales, y que los esquemas se desarrollen bajo la supervisión y coordinación de la provincia.
Angelini, uno de los hombres más cercanos al equipo de gobierno macrista, destacó especialmente que "bajo ningún punto de vista su partido va a utilizar en términos políticos un tema tan sensible como la inseguridad".
"Quedó claro que el año pasado, lo único que parecía importar era la cuestión electoral", advirtió Angelini en relación al reemplazo de los agentes de Gendarmería por la Policía Federal, en el último tramo de la gestión kirchnerista.
"Está claro que eso le hizo mucho daño a la ciudadanía de Rosario", repitió enfáticamente.
Reunión. El diputado comentó que hoy protagonizará un encuentro con la ministra Bullrich en que se analizarán estos temas relacionados a las necesidades que acarrea Rosario y su zona en relación a la inseguridad.
Por el momento es una incógnita el número de efectivos que la Nación estaría en condiciones de trasladar a esta región. En la provincia especulan en que antes de que finalice este semana aparezca una determinación oficial al respecto. Por lo pronto, en las conversaciones telefónicas, Bullrich le dejó en claro a Pullaro que su intención es no descuidar los trabajos de control en las rutas nacionales y en las fronteras.
En ese sentido, el diputado Angelini indicó que "las fuerzas provinciales tienen la responsabilidad de la seguridad ciudadana, y el gobierno nacional de los delitos federales. No es conveniente distraer los agentes que controlan el narcotráfico. Todas las fuerzas federales tienen que estar orientadas al control de las fronteras y de las rutas nacionales. De todas maneras, si tenemos que volver a dar una mano, lo vamos a hacer", aseguró.