La artista Marta Minujín obtuvo ayer el premio Velázquez de las Artes Plásticas 2016, que otorga el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte de España en reconocimiento al aporte sobresaliente de la totalidad de la obra de un creador iberoamericano a la cultura hispana.
En esta ocasión, el jurado presidido por Miguel Angel Recio, director general de Bellas Artes y Patrimonio Cultural dependiente de la cartera cultural ibérica, distingue a la artista argentina porque considera que "con su máxima creativa «todo es arte» fue pionera en nuevos comportamientos artísticos y en el desbordamiento de los marcos institucionales del arte y de los medios".
"Su posición contracultural y el compromiso político en un momento particularmente difícil se mantienen en la coyuntura internacional actual. Su desacralización de los mitos populares y la activación de los lazos sociales le han convertido en una precursora de las prácticas efímeras y relacionales", destacó el jurado.
El galardón, que el gobierno español otorga desde 2002, está dotado de 100.000 euros.
Marta Minujín (Buenos Aires, Argentina, 1943) realizó sus estudios en las escuelas nacionales de Bellas Artes de su ciudad natal. Presentó su primera exposición individual en 1959 en el teatro Agón y en 1960 obtuvo una beca del Fondo Nacional de las Artes que le permitió instalarse en París.
En 1964 fue invitada al premio nacional Di Tella, centro de referencia de los artistas de la época, donde expuso "Eróticos en technicolor" y "Revuélquese y viva". Posteriormente, en 1966, obtuvo la beca Guggenheim y se fue a vivir a Nueva York. A comienzos de la década de 1970, en un contexto de protestas civiles, Marta Minujín realiza en Nueva York, entre otras, dos importantes acciones, "Kidnappening", una combinación ficcional de secuestro y happening, e "Imago Flowing", que fusionaba ópera y happening.
En 1985 Marta Minujín realizó con Andy Warhol una obra paradigmática de la realidad latinoamericana que hacía referencia da la restauración de la democracia en Argentina: "El pago de la deuda externa con mazorcas de maíz". Durante esta acción, que Minujín lleva a cabo en The Factory, la artista "paga" simbólicamente a Warhol la deuda externa argentina con mazorcas de maíz.
Minujín recibió el premio Konex-Mención Especial (2012) además del Konex de Platino (1982 y 1992) otorgados por la Fundación Konex.
Sigue trabajando como artista en su taller en el barrio porteño de San Cristóbal.