Roberto Fontanarrosa y Jorge Luis Borges son dos figuras tan calificadas en la cultura argentina, que siempre están presentes. Pero pocos se lo imaginan ahora en un bar como El Cairo y en el más allá.
Dali López, el autor, actor y director de "Borges y Fontanarrosa en un bar del Paraíso" sí se los imaginó y hasta los fantaseó juntos en la Mesa de los Galanes. López y Raúl Calandra, otro de los protagonistas, le contaron a Escenario las sensaciones y sentimientos de encarnar a estas figuras en la obra que mañana, a las 21, regresa a Arteón (Sarmiento 778, planta alta).
Para el autor, no hubo una "especulación poética" en juntar a dos referentes como los citados: "Es más, no hubo ninguna más que lo que iba surgiendo naturalmente en el curso de un cuento que escribí y que luego adapté para teatro. Tal vez el antagonismo «popular-culto» hizo más rica la historia y permite giros impensados, especialmente para Borges".
La trama, agregó, se sustenta a partir de la aparición en el bar de una mujer, sobre quien, los miembros de la Mesa de los Galanes especulan fantasías e idealizaciones y todo tipo de estrategias para acercarse, mientras Borges cree que esa mujer es Beatriz Viterbo. "Allí aparece un factor común entre ambas partes: encontrar la mejor manera de acercarse a una mujer hermosa e idealizada", expresó López.
Para Calandra, que además integra el elenco del filme que se estrena hoy "Fontanarrosa, lo que se dice un ídolo", fue muy importante actuar en esta puesta "sobre todo porque es una obra escrita por un rosarino, con actores rosarinos, para un gran rosarino".
"Después de haber interpretado muchos de los textos de Fontanarrosa, jugar a que esté su presencia en vivo, es algo impactante en mí, como hombre de esta ciudad y esta cultura. Y como actor, un verdadero placer que, creo, se transmite al público. Estrenamos a sala llena, con una muy buena repercusión", destacó en referencia a la función realizada el viernes pasado en el marco de los diez años de la muerte del humorista.
"Te diría que al Negro se lo admira con ternura. Algo inusitado, al menos para mí. También es poseedor de un cariño unánime, que no genera controversias en su persona", agregó Calandra. "Su trabajo, tanto en lo historietístico, como en lo literario, tiene ese sabor popular de identificación inmediata, la bohonomía de lo barrial en el humor cotidiano. Pero sobre todo, inequívocamente rosarino", remarcó.
El actor destacó que "su trabajo, según un concepto de Borges, no apela a la simpleza, sino a una modesta complejidad". Y resaltó el orgullo que fue dar vida a una de las criaturas del Negro en "Sueño de barrio", dirigido por Néstor Zapata, en uno de los cuentos de Fontanarrosa representados en la película. "Para mí es un honor estrenar en la misma semana teatro y cine. Y me enorgullece que ambos productos sean bien rosarinos", dijo a Escenario.
En la obra, Fontanarrosa es interpretado por Mario Herrero, quien impacta por su parecido físico; Juan Carlos Capello da vida a Martorel; Nelson Cabrera a Belmondo y Calandra a Ricardo, tres personajes inspirados en miembros reales de la Mesa de los Galanes). En tanto, Dali López encarna a Borges; Jorge Arévalo es Cachito, el legendario mozo del viejo Cairo, y Daniel Vitantonio es Albamate. La obra tiene música original de Manuel López Berardi y la dirección es compartida entre Capello, López y Calandra.
López dijo que la idea es llevar la obra fuera de la ciudad "aunque todavía no hay un plan de gira", pero al menos irían a localidades del interior de la provincia. "También surge la idea de llevarla a Buenos Aires —consignó— donde Fontanarrosa, tanto el hombre como el escritor y humorista, suscita un interés casi unánime".
El bar soñado. Herrero (Fontanarrosa), Arévalo y López (Borges).