En 2002 The New York Times consideró a su álbum solista debut "Looking Forward" en su top 10 y dos años después la influyente Jazz Journalista Association lo nombró como el mejor artista de jazz de 2004. Seguramente una de las razones es que el saxofonista puertorriqueño Miguel Zenón desarrolla un lenguaje que fluye en el jazz moderno, conduciéndolo a un sonido propio y único. El músico, que hoy actuará por primera vez en Rosario _a las 21 en el Galpón de la Música_ vive en Nueva York desde hace ya muchos años, y su último y décimo álbum como líder de grupo, "Típico", acaba de ser lanzado a nivel mundial.
Zenón trabajó con grandes figuras del jazz, entre las que se destacan Charlie Haden, Fred Hersh, Kenny Werner, David Sánchez, Danilo Pérez, The Village Vanguard Orchestra,The SFJazz Collective, Jeff Ballard, Antonio Sánchez, David Gilmore, Ray Barreto y Bobby Hutcherson, entre otros. Además, grabó más de 50 registros discográficos en colaboración con otros músicos destacados, entre ellos los editados con el San Francisco Jazz Collective, un octeto de estrellas (la élite del jazz contemporáneo) del que son o han sido miembros desde su fundación en 2004 músicos como Joshua Redman, Bobby Hutcherson, Nicholas Payton, Eric Harland, Dave Douglas, Joe Lovano, Stefon Harris, Robin Eubanks y, actualmente, Mark Turner, Avishai Cohen y Zenón.
"Llevo ya casi veinte años viviendo en esta ciudad y la considero mi casa. Una inmensa mayoría de los músicos que más admiro viven en el área de Nueva York, y son una fuente constante de inspiración", dice Zenón a Escenario. También aclara que como puertorriqueño y latinoamericano cuenta con una perspectiva muy amplia viviendo en la ciudad y ha podido moldear su identidad "de una manera orgánica y honesta". Zenón sabe que es parte los aproximadamente 1,2 millones de puertorriqueños residentes en Nueva York. De esto da cuenta el músico en uno de sus últimos discos, "Identities are Changeable", que es el resultado musical de una serie de entrevistas personales (entre vecinos y comerciantes) de la colonia puertorriqueña de Nueva York; de las que utilizó no sólo las respuestas de los participantes sino que capturó algunos de los sonidos de la calle. Otro de sus álbumes, "Esta plena", también está conectado a su país natal, y es una inteligente fusión entre el jazz y la música plena portorriqueña.
Su última placa, "Típico", se aleja del sonido latino y se propone expresar el sonido típico del cuarteto de jazz. "Es sobre todo un disco de cuarteto de jazz, donde todos ponen lo suyo, y también se caracteriza porque no es un disco de música típica puertorriqueña, es cierto", dice, y luego añade: "Es también un trabajo que se hizo con la idea de resaltar el sonido que hemos desarrollado como cuarteto por los últimos 15 años. Combina muchos elementos musicales que me interesan en este momento y que pienso que muestran nuestra mejor cara como grupo", y rápidamente aclara que no estará tocando los temas del disco en esta gira por Argentina.
A estos recitales por el país, Zenón llegará acompañado por Arturo Puertas en contrabajo (con quien trabajara en su disco "Viva Jujuy"); Abel Rogantini en piano y Fernando Martínez en batería. "Son grandes músicos argentinos, aunque no he tenido la oportunidad de conocerlos personalmente ni de tocar con ellos todavía. La única excepción es Arturo Puertas, con quien tuve la oportunidad de grabar hace un tiempo atrás en Nueva York. Generalmente escribo la música específicamente para los músicos de mi banda, así que al no estar acompañando por ellos en esta ocasión, hice una selección de temas que se prestan para la ocasión".
Zenón tiene una conexión singular con Argentina y no pasa precisamente por la música, aunque "Rayuela" se trate de una novela que chorrea jazz de sus páginas. La influencia del libro de Julio Cortazar en el saxofonista fue tan fuerte que lo llevó a grabar un disco llamado "Rayuela" (2012) y a encarar un proyecto junto al pianista francés Laurent Coq para un concierto en París inspirado por la novela. "Leí «Rayuela» por primera vez hace poco más de 20 años y desde entonces la he releído muchas veces. Además de ser una gran historia, me llamó mucho la atención la estructura del libro, cómo Cortazar dejó muchas puertas abiertas para que el lector escogiera por donde ir", reflexiona.
Miguel Zenón nació y creció en San Juan de Puerto Rico. "Crecí rodeado de mucha música, mayormente música folclórica y bailable. En el momento no presté mucha atención al tipo de influencia que esto podía tener en mí, pero eventualmente fue esta conexión temprana con la música de mi país lo que permitió reencontrarme a mi mismo como músico y como puertorriqueño", dice, tras lo cual recuerda cómo apareció el saxofón en su vida: "Comencé a estudiar música formalmente a los 11 años; el primer día de clases mi idea era matricularme como estudiante de piano, pero no había espacio. La otras opciones eran guitarra, oboe y saxofón. Escogí el saxofón casi al azar, y eventualmente me acostumbré a él".
Sus primeros viajes al norte del continente tuvieron como horizonte estudiar, primero, en el Berklee College y luego en la Escuela de Música de Manhattan. "Eso influyó muchísimo en mi forma de tocar. Especialmente Berklee. Antes de llegar a Boston nunca había estudiado el jazz formalmente, ya que mi formación en Puerto Rico fue exclusivamente en saxofón clásico. Lo más que me ayudó fue estar rodeado por músicos de mi edad, todos con la misma hambre de aprender y, en su mayoría, mucho más adelantados que yo. En el momento me dio mucho impulso", recuerda.
EM_DASH¿Qué es hoy el jazz para vos?
—El jazz, al igual que cualquier otro estilo de música, es un lenguaje. En este caso, un lenguaje musical que logra balancear de manera idónea lo intelectual con lo sentimental. Pienso que el jazz actual es más global que nunca; ya no es música exclusivamente estadounidense, sino que incorpora elementos de todos los lugares del mundo.
EM_DASH¿Qué significa Charlie Parker, su vida, su estilo, para un músico que toca saxo alto como vos?
— Siempre ha sido mi norte como saxofonista e improvisador. Mientras más lo estudio, más me inspira.