Tanto ama Luis Salinas a Rosario que decidió festejar su cumpleaños número 58 en la ciudad con un show en el que presentará su nuevo trabajo discográfico doble llamado "El Tren", editado en su sello independiente. El prestigioso guitarrista se presentará junto a su hijo Juan Salinas y una banda conformada por prestigiosos músicos como el bajista chileno Christian Galvez, el baterista uruguayo Martin Ibarburu y el pianista cubano Hubert García, hoy a las 21.30 en Plataforma Lavardén (Sarmiento y Mendoza).
"Estuve cinco años sin grabar un disco después de «Sin tiempo», en el que participaron Tomatito y Spinetta y que fue nominado al Grammy. Todo eso fue tan fuerte que me tomé mi tiempo para grabar «El tren». Es un disco doble de solo guitarra y cosas que hago con el grupo, el primero en el que participa Juan. Hay invitados muy especiales, como Christian Galvez, un genio que toca con Billy Cobham y los grandes del mundo, tenerlo en el disco y que pueda ir a Rosario es muy especial para mí", destaca Salinas.
Pero el amor de Salinas por Rosario no es porque sí, pasaron muchas cosas que hicieron que la ciudad adquiera un significado trascendental en su vida. En Rosario, Luis conoció a la madre de su hijo Juan, un tiempo después, camino a Rosario, su mujer le mostró el test de embarazo positivo. Como si fuera poco, en ese mismo viaje Luis conoció al gran Paco De Lucía, que le dijo "tengo todos tus discos". "Rosario es mi segunda casa. De hecho Juan, mi hijo, está en este mundo por mi primer viaje a Rosario. En ese mismo viaje conocí a Paco De Lucía. En este disco hay un tema llamado «Paco», que cuenta la historia con él. Podría hablar por horas de lo que significa para mí ir. Rosario es un barrio grande. Cuando grabé mi disco en Estados Unidos, surgió mi disco llamado «Rosario»y cuando la gente pensaba que era de allá, no lo desmentía", cuenta orgulloso.
Además, el artista aseguró que Rosario fue el primer lugar que aceptó su libertad artística. "Tengo una complicidad con la prensa y la gente para tocar lo que yo quisiera, no sólo latin jazz. El público rosarino es sincero, es de sí o no".
En un mundo regido por el ego, donde los artistas cosechan más "likes" que aplausos, Salinas asegura que "el peor enemigo de la música es el ego. Nadie es más importante que la música". Y desarrolla esta teoría: "Con el tiempo me di cuenta que no hay mejor maestro que la propia canción. Una vez me llamaron de un diario muy importante para que haga una columna sobre los artistas que me gustaban y los que no. Respeto el trabajo de todo el mundo y no soy quién para opinar. Y no lo aceptaron así que no la hice (risas). Creo que todos tocamos como podemos porque si tocáramos como queremos, yo tocaría la guitarra española como Paco De Lucía, y si agarro la eléctrica tocaría como (George) Benson".
Con respecto a la relación con su hijo Juan, prometedor guitarrista, Salinas destacó que "uno quiere que los hijos sean felices". "Hacer música con él es un regalo de Dios. Hace un año cuando estaba grabando solo en el estudio le pregunté: «¿Cómo te sentiste?» Y me dijo: «Sentí una gran libertad pero a su vez sentí mis limitaciones». Escuchar eso de un chico de 15 años me pareció fantástico, muestra una gran maduración", reflexiona. Y de ahí, sus consejos se hicieron oír: "Le dije que hay que trabajar en las limitaciones para ser libre, como todo en la vida. Mi madre, que se me fue muy joven, me decía: «Primero la persona, ser buena gente, y después lo que hagas». No hay que llegar a ningún lado, sino encontrar el camino y caminarlo. Después cuando te vas, se verá lo que hiciste. Juan ya sabe que su camino es ser artista. Yo soy fan de Juan, es difícil ser objetivo cuando hablo de él".
GIRA. En julio Luis se embarcará en una gira por Francia también junto a su hijo Juan. El detonante de esta gira se originó cuando el guitarrista vasco francés, Sylvain Luc, llegó a tocar a Buenos Aires. "En ese encuentro, Luc me dijo que hagamos una gira por Francia, así que es un privilegio muy grande. Voy a tocar con él y su banda, y con Juan por supuesto. Después haremos conciertos por Estados Unidos y Brasil. En este momento, estoy preparando a Juan para que sea solista, no se trata solamente de mi carrera. El proyecto es tocar la mejor que pueda", cuenta el artista. Pero además, Salinas tiene una niña de 5 años, Rita, que "me está matando". "El otro día estábamos tocando con Juan en el living y pasó Rita y nos dijo: «¿Chicos podrían tocar mejor, por favor?»". Y remató emocionado: "Soy un agradecido de la vida por todo lo que me ha dado".