Los ex secretarios generales de la CGT Hugo Moyano y Luis Barrionuevo coincidieron ayer en que "está abierta" la posibilidad de volver a hablar de subas salariales con las empresas y enviaron un mensaje al gobierno de Mauricio Macri al advertir que en esa discusión "no tiene por qué meterse" y que rechazarla "es un horror".
"Las paritarias están abiertas siempre", subrayó Moyano y agregó: "Si necesito recuperar el poder adquisitivo del salario lo voy a discutir con las empresas y me van a forzar a discutir en paritarias y no tienen por qué meterse en ese sentido, no tienen que decir eso no se hace".
El dirigente gremial se expresó así poco después de que el secretario de Coordinación Interministerial, Mario Quintana, desestimara la eventual necesidad de reabrir la discusión salarial al afirmar que "en el salario de bolsillo la mayor parte de los trabajadores le habrá ganado a fin de año a la inflación".
Quintana, vicejefe de Gabinete, rechazó la reapertura de las paritarias. "En el segundo semestre la inflación va a estar muy por debajo" de los "acuerdos" salariales, por lo que "no va a haber una diferencia significativa" entre los ingresos de los trabajadores y el alza de precios.
"Vemos una realidad que ya está ocurriendo", dijo Quintana y expuso que "es cierto que en muchos de los casos de las paritarias que los gremios cerraron libremente, en el primer semestre el índice de inflación estuvo por encima de muchos de esos acuerdos".
Sin embargo, advirtió que "del mismo modo, en el segundo semestre la inflación va a estar muy por debajo de esos acuerdos paritarios".
Moyano, en cambio, señaló que si un gremio logra mejorar el acuerdo salarial con las empresas y el Ministerio de Trabajo no homologa el acuerdo, "obliga a salir a la protesta".
El secretario general del Sindicato de Choferes de Camiones consideró que el gobierno "por no tener la suficiente experiencia hizo cosas que no se hicieron bien" y que "esos errores los termina pagando la gente con más necesidad y el país en general".
"El gobierno habla como si viviéramos en la panacea. Ellos no saben, porque seguramente no lo han vivido, que hay muchas necesidades en gente que tiene un trabajo que no está bien remunerado, que no tienen trabajo. Como no lo han vivido no se dan cuenta", añadió el gremialista.
Además, el líder camionero ironizó sobre la proyección internacional del país que resalta el gobierno y señaló: "Por más que quieran aparecer que en el mundo nos reciben con los brazos abiertos, yo recuerdo una frase del general (Juan Domingo Perón) que decía que cuando te aplauden los de afuera es porque estás jodiendo a los de adentro".
Por su parte, Barrionuevo consideró que "hablar ahora de no abrir paritarias es un horror, porque el Ministerio (de Trabajo) avaló a algunos gremios (las subas) que han firmado por seis meses y tienen que volver a abrirlas".
El líder del gremio gastronómico subrayó que "hay muchos gremios que también dejan asentado que si hay algún deslizamiento de precios y demás se puede llegar a volver a conversar (de aumentos salariales)".
"Nos van a convencer cuando empiece la recuperación de lo que es el consumo", agregó.
Respecto de la posibilidad de un paro nacional, Barrionuevo reconoció que en la CGT "hay mayoría que se inclina por esa medida" pero consideró que primero "hay que agotar todas las instancias".
"Hay mayoría que se inclina por esa medida. Yo creo que va a primar el diálogo, pero no sé por cuánto tiempo. Hay que agotar todo el diálogo. La última instancia es seguramente elaborar la agenda y llevársela al presidente. Y eso todavía hay que realizarlo", señaló el dirigente de los gastronómicos.
Facundo. Por su parte, el diputado massista Facundo Moyano consideró que era una "imprudencia" de sectores del gobierno "intentar limitar la discusión paritaria" para el año próximo y advirtió que no incluir en el proyecto de Presupuesto 2017 cambios en el impuesto a las ganancias es un "motivo más" para decidir una "posible medida de fuerza" en octubre.
"Ponerle techo a la paritaria es una imprudencia porque las paritarias son libres", alertó Facundo Moyano, y remarcó que "estar hablando de un 17 por ciento de aumento salarial", porque esa es la pauta inflacionaria que estima el Ejecutivo para el año próximo, es negativo porque "es una discusión que se tiene que dar libremente".
Moyano fue consultado sobre afirmaciones de autoridades económicas respecto de que las subas salariales durante el año próximo no deberían superar el "17 o 19 por ciento" en base a las estimaciones antiinflacionarias.
"Están pidiendo implícitamente que los sindicalistas acepten una reducción de salario", se quejó el diputado nacional por el Frente Renovador.
Por otra parte, lamentó que en el proyecto del Presupuesto para el año próximo presentado por el ministro de Hacienda, Alfonso Prat Gay, no esté incluida la "discusión" de la modificación de las alícuotas del impuesto a las ganancias.