El socialismo español se dirige a una casi segura aprobación de la postura mayoritaria en el partido, que es dar la abstención parlamentaria que permitirá formar gobierno a Mariano Rajoy y el PP y así cerrar un período de inestabilidad política que lleva ya diez meses. La mayoría de los críticos del PSOE respetarán la disciplina de voto si el comité federal decide la abstención en la decisiva reunión de este órgano el próximo domingo. Según analiza el diario El País, esta situación permite a la "gestora", la comisión que dirige el partido desde la renuncia forzada del secretario general Pedro Sánchez, afrontar con tranquilidad la reunión del comité y la posterior sesión parlamentaria. En la negativa a dar paso al gobierno de Rajoy se mantienen los diputados catalanes, de islas Baleares y otros tres o cuatro parlamentarios, sobre un total de 85. El presidente de la gestora, Javier Fernández, reconoció que su partido se mueve entre opciones "todas malas", pero la peor sería volver a las urnas.