Tropas del ejército brasileño enviadas a Río de Janeiro ocuparon diferentes favelas de la ciudad, en el marco del plan del gobierno nacional para contener la ola de violencia que afectala metrópoli carioca.
Tropas del ejército brasileño enviadas a Río de Janeiro ocuparon diferentes favelas de la ciudad, en el marco del plan del gobierno nacional para contener la ola de violencia que afectala metrópoli carioca.
Como resultado del operativo, que movilizó a 5.000 efectivos de las distintas fuerzas de seguridad destinadas en Río, de los cuales 3.600 son efectivos del ejército, dos personas murieron al enfrentarse a efectivos de seguridad, otras 18 fueron arrestadas, se incautaron dos pistolas, una granada y una no especificada cantidad de marihuana y cocaína.
En la operación, que tuvo como objetivo el combate al robo de camiones de cargas y el tráfico de drogas, las fuerzas de seguridad ocuparon desde la madrugada tres favelas en la Zonas Norte y Oeste de la ciudad, en la región metropolitana de Río de Janeiro, en un procedimiento que incluyóapoyo aéreo y el corte de calles y avenidas para cerrar la entrada y salida en la región.
El ministro de Justicia y Seguridad Pública de Brasil, Torquato Jardim, explicó a la prensa que las acciones en conjunto de las fuerzas nacionales y del Estado carioca ya provocan efectos en el combate al delito.
"Ya se producen resultado significativos. El primero, terminar con el mito del crimen organizado poderoso, que no existe acción legal que lo detenga", destaco Jardim.
Según las autoridades, esta megaoperación, denominada Onerat, es la segunda etapa de las acciones de seguridad para combatir la ola de violencia que afecta a Río de Janeiro.
Cifras impresionantes
Hace ocho días el presidente de Brasil, Michel Temer, autorizó el envío de una fuerza nacional de 10.000 efectivos a la metrópoli más turística del país sudamericano por los problemas de seguridad que enfrenta desde el final de los Juegos Olímpicos hace un año.
En lo que va de año han muerto más de 90 policías, y se reportan asaltos y tiroteos en toda la ciudad.
La misión está compuesta por 8.500 hombres del Ejército y 620 de la Fuerza Nacional, esta última una tropa mixta militarizada usada para situaciones de emergencia. El resto se completa con efectivos de la Policía de Carreteras y de las fuerzas locales cariocas.