Los gobiernos europeos reafirmaron a coro su apoyo a la unidad de España y su Constitución, respaldando al gobierno de Mariano Rajoy en su pulso con los secesionistas de Cataluña.
Los gobiernos europeos reafirmaron a coro su apoyo a la unidad de España y su Constitución, respaldando al gobierno de Mariano Rajoy en su pulso con los secesionistas de Cataluña.
La Comisión Europea, el brazo ejecutivo de la UE, "reitera su llamamiento anterior al pleno respeto del orden constitucional español", dijo su vicepresidente Valdis Dombrovskis. "Apoyamos los esfuerzos para superar la división y la fragmentación para asegurar la unidad y el respeto de la Constitución española", apuntó el letón, tras respaldar a "todas las fuerzas políticas que están trabajando para alcanzar una solución dentro del marco" constitucional.
"Una declaración unilateral de independencia de Cataluña sería irresponsable", declaró por su lado Sigmar Gabriel, ministro de Relaciones Exteriores de Alemania. "No podrá hallarse una solución más que en el marco del derecho y del respeto de la Constitución española. A fin de cuentas, una solución duradera solo podrá funcionar con el apoyo de una mayoría de españoles y de catalanes".
Francia se declaró "preocupada" por la situación en Cataluña.
"Cualquier solución a esta crisis interna debe encontrarse en el marco constitucional español", afirmó el Ministerio de Relaciones Exteriores. "La unidad y la legalidad constitucional deben respetarse y preservarse. Cualquier declaración unilateral de independencia por parte de las autoridades catalanas sería ilegal y no podría en ningún caso ser reconocida". En Italia, el jefe de gobierno, Paolo Gentiloni declaró: "Hay que subrayar la necesidad de respetar el marco constitucional y las leyes españolas. El llamamiento al diálogo para evitar una escalada injustificada y peligrosa debe desarrollarse en el interior de un marco. Y este marco es el de la Constitución".
"Portugal respeta la soberanía de España", declaró el gobierno, convencido de que su homólogo español "sabrá asegurar el orden constitucional en España así como los derechos y las libertades de sus ciudadanos".Apelando a los "principios fundamentales del derecho internacional", Rusia consideró los acontecimientos de Cataluña "un asunto interno de España", declaró Moscú. "Expresamos la esperanza de que la situación se solucione a través del diálogo, en el estricto respecto de la leyes españolas y en el interés de un Reino de España unido y próspero".