Las cantidades vendidas por los comercios minoristas por el Día del Padre cayeron 7,5 por ciento frente a igual fecha del año pasado. Así lo indica un relevamiento realizado por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came). De acuerdo al trabajo, el ticket promedio este año se ubicó en $480, un 23 por ciento por encima del año pasado, cuando la inflación anual supera al 40 por ciento. Esto marca la fuerte caída en las ventas, ya que el consumidor no solo compró menos unidades de productos, sino también más económicos.
La celebración en honor a los padres no pudo con la retracción general del mercado de consumo. El relevamiento de la entidad que agrupa a pequeños y medianos empresarios alcanzó a 620 comercios de todo el país.
Entre sus conclusiones, el trabajo advirtió que los comercios lanzaron desde principio de semana descuentos de hasta 50 por ciento, promociones 2 por 1 y hasta 18 cuotas sin interés para captar las ventas en la una de las principales fechas especiales del año.
Sin embargo, si bien eso fue un elemento determinante para sostener el consumo, no alcanzó. Los consumidores caminaron y compararon mucho antes de decidirse y terminaron inclinándose por regalos más económicos.
El grueso de las ventas se repartió bastante parejo entre viernes y sábado. Pese al feriado, la mayoría de los locales del centro y los paseos comerciales barriales abrieron sus puertas para no perder ventas en manos de los shoppings y las grandes cadenas de supermercados que sí abrían ese día. Y la estrategia funcionó, porque efectivamente muchas familias salieron de compras el viernes, aprovechando el descanso y el día.
A diferencia del año pasado donde de rebote el público adquiere otras cosas, especialmente indumentaria femenina y de chicos, hubo menos compras adicionales más allá del regalo del padre que otros años. El público fue a comprar su obsequio y trató de no mirar mucho más.
Según el trabajo de Came, el ticket promedio este año se ubicó en $480, un 23 por ciento por encima del año pasado, cuando la inflación anual supera al 40 por ciento. Esto marca la fuerte caída en las ventas, ya que el consumidor no solo compró menos unidades de productos, sino también más económicos.
Rubro por rubro. El informe de la Came advierte que se registraron menores ventas en los catorce rubros medidos. Las principales variaciones en las cantidades vendidas en la semana del Día del Padre, comparándolas con el año pasado, se registraron en los artículos para el hogar y para uso personal (un 13,19 por ciento menos), gastronomía y restaurantes (11,9 por ciento menos), librería (9,4 por ciento menos).
Uno de los rubros con mejor performance fue "vinos y licores", que si bien tuvo una caída de 1,9 por ciento frente al año pasado, fue de los artículos que menos cayeron. Los negocios de indumentaria también estuvieron concurridos. La baja fue menor a muchos de los otros ramos por las promociones y descuentos.