¿Pueden los adolescentes habituados a las redes sociales estar 30 días sin conectarse a Facebook? Un grupo de estudiantes del Colegio Ciudad de Buenos Aires aceptó ese desafío propuesto por un certamen organizado por Chicos.net y Rednatic. La meta era buscar una mirada crítica sobre este uso. La directora de Chicos.net, Marcela Czarny, recuerda que fue hace dos años y que a esta convocatoria se sumaron adolescentes de toda Latinoamérica. Los ganadores fueron estos chicos porteños, que registraron el día a día en un documental que puede buscarse en el canal Youtube como "30 días sin Facebook". El video dura poco más de 21 minutos, muestra cuando toman la decisión, el proceso y los que logran llegar al final de la meta.
"Yo creo que no podría", "Me voy a perder de pasar las tareas", "No, porque no me voy a comunicar con mi hermano y papá que están en México", "Yo sí voy a poder". Algunos de los comentarios cuando recibieron la invitación a cerrar la cuenta.
"Me voy a morir". ¿Y qué dijeron cuando pasaron los primeros días sin estar conectados a la red social?; "Me arrepentí", "Siento que me voy a morir, pero voy a ver lo que pasa", "Voy a poner la vida en esto, lo voy a lograr", "No me puedo comunicar con mis amigos por lo trabajos de la escuela, por más que tenga el celular!". También en los diálogos que comparten con la cámara que los entrevistó aseguraron entre otros aspectos positivos. "Ayer llegué tarde a mi casa y si entraba a Facebook seguro me iba a quedar colgada", "Tengo más tiempo libre para hacer otras cosas, toco la guitarra, leo. El primer día me puse a tirar la pelota contra la pared", "Hasta ahora no encontré nada positivo con esto, porque si tengo una duda con una tarea no puedo responderla". "Llevo 9 días sin Facebook, estoy desesperado, no sé qué hacer, no puedo hablar con mis amigos, estoy tratando de resistir pero no voy a aguantar más", "Mis amigos me dijeron que tenía como 15 notificaciones y nos la había leído, me quiero ir!"
A la hora de reflexionar sobre el lugar que este medio ocupaba en sus vidas y evaluar la experiencia reconocieron que era una herramienta para comunicarse, pero también que generaba algún vicio. Así se expresaron: "Es el lugar para el chisme", "Lo uso para ver qué vamos a hacer el fin de semana", "Te enterás de todo", "Muchas personas viven por internet", "Podés verte con gente que no te ves", "Mi vida no pasa por Facebook, Facebook está en mi vida", "Ahora me doy cuenta que uso menos la compu, que puedo hacer más cosas, antes entraba a Facebook y no paraba", "Volví a usarlo porque me di cuenta que era una vía de comunicación para conectarse con todos. Lo voy a abrir y lo voy a usar menos para no estar colgado constantemente".