Un congreso sobre Inclusión Digital reunió a más de 3 mil educadores (entre docentes e investigadores) y expertos de distintas universidades para debatir y seguir de cerca la aplicación del Modelo 1 a 1 (una computadora por alumno) que en la Argentina, ya alcanzó a más de un millón de estudiantes y va por la meta de los 3 millones. El encuentro estuvo organizado por el Programa Conectar Igualdad y se realizó los dos primeros días de septiembre en la Facultad de Derecho de Buenos Aires. La Universidad Nacional de Rosario (UNR) presentará a fin de este mes una primera evaluación de cómo se aplica el plan en la región.
La cita congregó a destacados especialistas nacionales e internacionales, como Nicholas Burbules (EEUU), Nelson Pretto (Brasil), Cristóbal Cobo (España); pero además hubo talleres y espacios para compartir experiencias sobre la implementación de las netbooks en distintos campos y disciplinas.
Tal como destaca un informe difundido por la UNR (www.unr.edu.ar), “las once universidades nacionales —entre ellas la UNR— que desde febrero de este año llevan adelante en todo el territorio nacional una de las principales líneas de Seguimiento y Evaluación del Programa Conectar Igualdad, participaron de una conferencia donde compartieron la experiencia de realización de dicha evaluación y el estado en el que se encuentra”.
Estrategias. En ese panel se compartieron las distintas estrategias y acciones que desarrollan para medir los impactos educativos, institucionales y sociales de ésta política. Participaron Cynthia Zapata, coordinadora del Programa; Lilia Toranzos, coordinadora técnica del equipo; Cora Steinberg, responsable de evaluación, y Marta Kisilevsky, responsable del estudio con universidades y, representando a las 11 universidades, Adela Monge (UNCuyo) y Dardo Ceballos (UNR).
"El Programa Conectar Igualdad, en tanto estrategia educativa, es una política que se va planificando y evaluando en conjunto con las 24 jurisdicciones”, afirmó Cynthia Zapata. “La idea de realizar un seguimiento y evaluación fue concebida desde el inicio para evaluar el impacto de esta política a corto, mediano y largo plazo y acompañar los cambios que se producen en el sistema educativo”, agregó.
Adela Monge, de la Universidad Nacional de Cuyo (Mendoza), detalló el trabajo de las universidades, destacando el rol de “consultoras de lujo” que ocuparon en este proyecto de evaluación, y afirmó “que la experiencia ha resultado todo un desafío generando nuevos rumbos y espacios dentro de las mismas universidades”.
En tanto que Dardo Ceballos, director del Proyecto de Evaluación y Seguimiento radicado en el Instituto de Estudios Universitarios UNR 2020, presentó un work in progress de un cortometraje documental que formará parte del informe final. Se trata de un registro audiovisual, realizado por el equipo de investigación de UNR, que da cuenta de las distintas instancias del trabajo al mismo tiempo que indaga sobre el impacto del programa. El trabajo fue rodado en Corrientes, en una escuela secundaria de la Isla Apipé, ubicada al norte en el límite con Paraguay y frente a la Represa Yacyretá.
Análisis de datos. Todas las líneas de seguimiento y evaluación del programa tienen en cuenta las características del sistema educativo actual y las territoriales del país, vasto y diverso. La investigación de la que participa también la UNR, se encuentra por estos días en la fase de análisis de sus datos, el informe final está previsto que se presente a fines de septiembre para ser publicado formalmente por el Ministerio de Educación de la Nación los primeros días de octubre.