Responsable de la fiscalización que se lleva adelante en la ciudad, el secretario de Control y Convivencia Ciudadana del municipio, Gustavo Zignago, consideró que el descenso del número de siniestros viales y de los lesionados habla de una "apropiación de la sociedad de pautas de conductas y de hábitos responsables a la hora de manejar". Conductores designados, una baja en las alcoholemia con resultados positivos, y el uso tanto del casco como del cinturón de seguridad son algunos de los buenos "síntomas" a los que también hizo referencia el director de Servicios de Salud, Juan Becerra.
Si bien no marca una estadística, el funcionario de salud recalcó que "una tendencia en el uso del casco muestra que hace diez años, en cualquier esquina, de diez motos apenas dos lo llevaban; mientras que ahora son entre 8 y 9 de una decena los conductores que utilizan este elemento de seguridad".
El dato no es nada menor si se tiene en cuenta que la motocicleta es el vehículo que con mayor frecuencia está involucrado en colisiones con lesionados. A ese punto, Becerra sumó otro elemento que es el uso del cinturón de seguridad en los autos y puntualizó que "casi en el 50 por ciento de los siniestros con lesionados en auto, las personas circulaban con el cinturón colocado".
Controles. Aunque los operativos de fiscalización provocan quejas, los funcionarios aseguraron que son un factor central a la hora de evaluar el descenso de los accidentes. Sin embargo, el director del área de salud también se refirió a la injerencia que esto tiene en la gravedad de las heridas de una persona.
"Los controles de velocidad, que muchas veces los conductores los consideran meramente recaudatorios, tienen una diferencia desde el punto de vista de las consecuencias sanitarias", recalcó Becerra, y lo graficó: "Disminuir sólo en 5 kilómetros por hora la circulación en la vía pública en una ciudad, de 50 a 45, hace que las lesiones por el impacto cambien notoriamente, y mucho más aún si se utilizan los elementos de seguridad, como el cinturón".
Sobre los "mejores hábitos", el secretario de Control puntualizó que "ya es normal encontrar en los operativos vehículos donde hay un conductor designado que no consume alcohol". Señaló, en tanto, que también se viene dando una baja en tests de alcoholemia con resultado positivo.
Sensible. "Es un descenso sensible, gradual, pero sostenido", remarcó Zignago, y detalló que en 2013 del total de exámenes realizados, un 14 por ciento tenía resultados positivos por encima de 0,5 gramo de alcohol por litro de sangre, mientras que actualmente bajó a un 8 por ciento.