Un equipo expedicionario del Parque Nacional Artico Ruso encontró una base secreta nazi en el Artico, en la que funcionó una estación meteorológica levantada para que Hitler recibiera informes del clima que lo ayudasen a decidir sobre sus operaciones militares.
Los expertos encontraron más de 500 objetos de valor histórico entre las ruinas de las instalaciones ocupadas entre 1943 y 1944, y fueron destruidas en la década de 1950.
La estación llamada Schatzgraber (Caza fortuna en alemán) estaba situada en la isla Alexandra, a 1.000 kilómetros del Polo Norte. El parque nacional ruso dio a conocer un video en el que se pueden ver los restos aparecidos en el lugar, conservados por las bajas temperaturas.
El diario español ABC había adelantado en 2015 sobre la misteriosa base en las heladas tierras del sur de Groenlandia, cuyos ocupantes fueron los últimos en rendirse, cuatro meses después de terminada la contienda.
La unidad estaba integrada por científicos, la mayoría de ellos meteorólogos que habían sido destinados de forma secreta a la zona para enviar periódicamente a Hitler informes meteorológicos.
La reserva natural rusa tiene una extensión de más de 14.000 kilómetros y fue inaugurada en 2009. Entre los restos descubiertos hay cajas de munición, equipo militar, artículos para el hogar, electrodomésticos, objetos personales o partes meteorológicos.
"La estación fue destruida deliberadamente en los años 50 del siglo pasado, y solo han sobrevivido en su interior fragmentos, restos de escombros, trozos del edificio. De momento no podemos llegar a ninguna conclusión", señaló uno de los investigadores del parque, Evgeny Ermolov.
La estación se encuentra en la Tierra de Alexandra, a unos 500 metros de la costa, se eleva 30 metros sobre el nivel del mar, se cree que operó desde septiembre de 1943 hasta julio de 1944, y según los primeros datos, transfirió más de 700 informes meteorológicos.