Productores hortícolas de Villa Gobernador Gálvez y el Mercado de Productores de Rosario alertaron sobre la venta callejera de verduras robadas en esa ciudad, con el agregado de que se trata de plantas recientemente fumigadas y no debidamente lavadas, lo que las convierte en un peligro para la salud de la población.
"Pedimos a la población de Villa Gobernador Gálvez que no compre verdura a carros ambulantes porque son robadas y tienen un alto grado de toxicidad, ya que están recién fumigadas y todavía no pasó el tiempo necesario para que estén aptas para el consumo humano" dijo Héctor Ansaldi, productor que desde hace años trabaja en esa ciudad lindera con el sur de Rosario.
Según el testimonio de ese productor hortícola, quien incluso radicó numerosas denuncias en la comisaría 29 de esa localidad (ubicada en Juan B. Justo y Garay), en las últimas semanas recrudeció el robo de verduras en las quintas de la zona, una práctica "que tiene 40 años" pero que se agrava en períodos de crisis económica y falta de trabajo.
Ansaldi explicó que las lluvias de principio de otoño provocaron una escasez de verduras, lo que a su vez se tradujo en una suba de precios y convirtió a esa mercadería en un bien preciado a la hora de la venta ilegal.
"Cuando los conflictos sociales se tornan más graves como ahora este problema empeora. Me hace acordar a lo que pasaba en 2001 cuando se hacía lo mismo, en ese momento se realizaban reuniones para ver cómo se podía solucionar el problema".
Peligroso. El productor alertó sobre el problema de salud pública que significa la venta de verduras sin control: "nosotros tenemos nuestra producción pegada a la ciudad por lo que el robo es muy fácil, alcanza con saltar una zanja o un alambrado y servirse", señaló, para agregar que el problema en este caso es doble, ya que además de tratarse de mercadería robada al no haber recibido el lavado correspondiente la verdura conserva altas dosis de agroquímicos.
"Hacemos el tratamiento adecuado como ordena el Senasa, hay tiempos y métodos que hay que respetar para que el producto llegue sano al consumidor, pero cuando se roba se ofrece al otro día y el riesgo para la salud es grande", alertó. "Además del robo, se intoxica a la población".
Entre las verduras más robadas y luego vendidas de forma ambulante a la población figuran la acelga, la lechuga, el puerro, el perejil y la radicheta. "Es lo que se llevan y después vemos que la ofrecen acá nomás, en la zona de Gálvez, roban a la madrugada y a la mañana ya la están vendiendo a los vecinos".
Por ese motivo, recomendó no comprar a los carros de vendedores ambulantes y recurrir a las verdulerías, que comprar su mercadería en los mercados de productores donde son controladas.
Consultado sobre la posibilidad de un robo para autoconsumo, explicó que eso existe pero que no es el caso actual, ya que se sustrae a gran escala con el objetivo de comercializarlo.
"En la policía nos dicen que no tienen el móvil pero que ya se van a encargar, nos preguntan cómo estaban vestidos y a qué hora van a robar. El tipo de respuestas a los que nos tienen acostumbrados", agregó Ansaldi, quien aclaró que si bien él hizo una denuncia en particular en toda la zona de producción de Villa Gobernador Gálvez "se escuchan las mismas historias".
Alerta. Desde el mercado de productores de Rosario también lanzaron un alerta al tratarse de mercadería "fumigada y sacada a la venta sin saber que hay que hacer", y ratificaron que se trata de una modalidad recurrente que están padeciendo varios quinteros de esa zona.
"El mayor problema es que se está vendiendo esa mercadería con veneno, por eso queremos alertar a la población que no compren a vendedores ambulantes en la zona de Villa Gobernador Gálvez, que no puedan acreditar el origen de la mercadería que ofrecen para consumo", dijo Juan Sulgati, de esa entidad.