El presidente de la Comisión de Energía de la Cámara de Diputados, el exministro de Planificación Julio de Vido, cuestionó hoy al ministro de Energía, Juan José Aranguren, por lo que calificó como "brutal tarifazo" que, aseguró, "transfirió a los productores de gas 3.500 millones de dólares", en una carta dirigida al plenario de comisiones que escucha al funcionario en el Congreso.
De Vido, ausente del plenario a pesar de ser el presidente de una de las cuatro comisiones participantes, explicó que no fue para "evitar que se desvíe la discusión hacia cuestiones que responden a diferentes concepciones ideológicas y políticas, especialmente en relación al rol del Estado, la soberanía nacional y el libre mercado".
El ex ministro precisó que su decisión respondió "en virtud del intento explícito del gobierno nacional y los diputados del oficialismo de promover un debate sobre lo realizado en los últimos doce años en materia energética" en lugar de "dar las explicaciones" en relación a cuáles fueron los criterios técnicos y fundamentos del "brutal tarifazo".
El alza en los servicios energéticos dispuestos este año por el ministro Aranguren, según De Vido, "afectó a millones de familias que no pueden pagarlo e implica una transferencia directa a las empresas, en el caso del gas de 3.500 millones de dólares a los productores".
"Esperamos que el ministro explique lo que se preguntan tanto el pueblo argentino como la Corte Suprema de Justicia: cómo llegó a esos salvajes porcentajes de aumentos que ni él mismo pudo fundamentar cuando visitó el Senado", escribió el ex titular de Ministerio de Planificación durante los doce años de los gobiernos kirchneristas.
La carta entiende que "el brutal tarifazo aplicado por Aranguren afectó a millones de familias que no pueden pagarlo e implica una transferencia directa a las empresas, en el caso del gas de 3.500 millones de dólares a los productores".
En referencia al contrapunto que De Vido viene manteniendo con el gobierno en los últimos meses, el exministro afirmó que "con esas tarifas que muchos califican como «atrasadas» se invirtieron en el sector 25 mil millones de dólares" lo que permitió —aseguró— obras como la terminación de Atucha II, Yacyretá, la construcción de 5.500 kilómetros de líneas de alta tensión para incorporar 11 provincias a la red nacional.
Además, destacó de su gestión haber aumentado 12 mil megavatios la capacidad instalada, con un pico de consumo que pasó de 14.500 megavatios en 2003 a más de 25.000 en 2015, y la recuperación de la petrolera YPF, la incorporación de 2,5 millones de hogares a la red de gas y de 6 millones al servicio de electricidad.
"Todo fue posible con tarifas competitivas, con costos argentinos, que hicieron posible la creación de 6 millones de puestos de trabajo, un crecimiento de la industria exponencial y sobre todo que millones de argentinos puedan pagar las tarifas de gas y electricidad", señaló De Vido.