Víctor Welsh pone en valor a la psicología deportiva sustentado en su experiencia, ya que luego de trabajar en Central se sumó al cuerpo técnico de Frank Kudelka, con quien desempeñó la función en Unión y Talleres de Córdoba. "Hay hechos concretos que reflejan la importancia de la labor interdisciplinaria en el tenis, boxeo, hockey y también en el fútbol moderno. Claro que en el fútbol depende mucho de la amplitud del director técnico, de su disposición y convicción de la utilidad del entrenamiento mental para afrontar los desafíos que presenta el deporte. Marcelo Gallardo en River es un muy buen ejemplo, porque alcanzó un gran potencial en el primer año y en esto también tuvo que ver la labor que desarrolló Sandra Rossi, especialista en neurociencias. Ese equipo exhibió una velocidad muy superior al resto, mostró un grado de concentración que le permitió reducir el tiempo de las jugadas de manera considerable y era increíble el grado de confianza que evidenciaba partido tras partido", analiza el profesional rosarino, quien revela que el mayor grado de interacción ideal para trabajar el aspecto psicológico con un plantel es durante el desarrollo de las pretemporadas, cuando se alcanza el mayor tiempo compartido y sin las tensiones propias de la competencia. Welsh también ejemplifica la importancia de la humildad en un jugador para comprender que siempre hay cosas para aprender. "En Talleres logramos dos ascensos en un año y medio y esa experiencia fue sensacional porque en el plantel está el Cholo Guiñazú, quien a los 38 años es el primero en cumplir con todas las exigencias, por eso todavía juega y tiene un nivel de atención que le permite rapidez mental y lucidez en el juego. Ojalá sea entrenador, porque es alguien que además de esforzarse contagia dedicación y es un ejemplo para todos sus compañeros".