A cuatro años de haber sido procesados, dos ex celadores del Hogar del Huérfano fueron condenados a 15 años de prisión por el delito de abuso sexual con acceso carnal agravado por su condición de guardadores de la víctima. La víctima fue un nene de 9 años que se encontraba alojado en el edificio de Laprida al 2100.
En primera instancia, la denuncia había sido realizada por la familia sustituta del niño y luego fue llevada a la Justicia por la Subsecretaría de Niñez, Adolescencia y Familia de la provincia, que además se constituyó en querellante en la causa.
Ahora, el fallo fue dictado por el juez de Sentencia Nº 4, Julio Kesuani, que condenó a prisión efectiva a los dos ex empleados del orfanato, de 44 y 46 años.
La primera denuncia del caso fue realizada en su momento por la familia sustituta de R., el niño que había sido víctima de los abusos. Su madre sustituta había percibido conductas sugestivas en el nene, por lo que le hizo varias preguntas y a raíz de sus respuestas percibió que había sido víctima de una situación de abuso sexual, lo que la llevó a realizar la denuncia. A partir de ese momento, la Subsecretaría de Niñez santafesina judicializó el caso.
Las lesiones del chico fueron constatadas por un equipo médico, e incluso llegó a comprobarse que la falta de control de esfínteres del menor estaba vinculada con los daños corporales padecidos tras los abusos sexuales.
Los dos ex celadores fueron procesados en 2012 por el juez Juan Andrés Donnola, que por entonces consideró la precisión de la denuncia, la constatación de las lesiones, la contundencia de los informes psicológicos, el dictamen de la forense del Hospital de Niños Víctor J. Vilela, los resultados de la Cámara Gesell y la rueda de reconocimiento fotográfica que se había llevado adelante en el despacho del magistrado.
Así y todo, si bien los acusados —un tercer sospechoso había quedado entonces en libertad— estuvieron detenidos durante parte del proceso, llegaron a esta instancia definitoria con prisión domiciliaria.
El fallo. Ahora, el juez Kesuani condenó a 15 años de prisión a los dos ex empleados que tenían responsabilidad sobre el cuidado de la víctima, y que habían sido despedidos de la institución en marzo de 2011.
La Dirección de Promoción de los Derechos de Niñez, Adolescencia y Familia, que intervino a través de las abogadas Mónica Barroso Bonvicini, Patricia Virgilio y Nadia Darigo, habían pedido la pena máxima prevista, 20 años.
La condena es por el delito de abuso sexual con acceso carnal agravado por su condición de guardadores de la víctima.
El final. Tras la denuncia, en 2011 en el marco de la ley de Protección Integral de los Derechos del Niño y a través de una orden judicial, el Estado provincial sacó a todos los niños que estaban alojados en el Hogar.