La Municipalidad se encuentra instalando 27 cámaras de videoseguridad para poder cobrar multas de tránsito en las calles de la ciudad de Rosario. Estos dispositivos fueron autorizados por el Concejo dentro del paquete de medidas que impulsó recientemente la Intendencia para enfrentar la situación apremiante de inseguridad. El concejal Diego Giuliano advirtió que existe una normativa vigente que indica que las ubicaciones y la distribución de esas cámaras deben ser consultadas previamente con el Palacio Vasallo.
"Si no consultan al Concejo, no sólo violentan una ordenanza vigente, sino que desperdician un enorme insumo como es la participación de los vecinos en la comisión de seguridad", reclamó enfáticamente Giuliano.
"Cuando un vecino se acerca hasta el Concejo para solicitar la presencia del Estado en su barrio, salta una barrera, vence el miedo, y se hace vocero de un reclamo comunitario. Si el Municipio no convoca a la comisión para decidir la ubicación de las cámaras de videovigilancia es porque decidió detenerse en la recaudación y no en la prevención de la violencia", se encargó de puntualizar el presidente de la comisión de seguridad.
El edil explicó que la ordenanza "crea una comisión de videovigilancia, en la que participa el Ejecutivo y la comisión de Seguridad del Concejo para, entre otras cosas, proponer la ubicación de las cámaras de videovigilancia en la ciudad".
Giuliano resaltó que los concejales tienen información de calidad con la gran cantidad de vecinos que se acercan para plantear sus problemas de inseguridad. "Esto está directamente relacionado con el insumo que nosotros tenemos. Tenemos 28 personas que reciben permanentemente insumos. Cada uno de los concejales lo hace cotidianamente. Cuando uno mira los asuntos entrados en el Concejo, hay pedidos de cámaras y de patrullajes, recurrentemente", comentó.
De acuerdo al referente de la comisión de Seguridad, en esta ocasión no fueron consultados. "Es una decisión unilateral del Municipio, con la única asistencia de la policía. Si no atienden el reclamo de los vecinos, es porque están detrás de un afán netamente recaudatorio, o porque la única opinión que escuchan es de la policía", exclamó.
Según Giuliano, siempre hay que tener en cuenta la opinión del vecino, que acude al Concejo Municipal y expresa sus necesidades más angustiantes. "En orden de mérito, en seguridad, los vecinos lo primero que piden es presencia policial, que puede ser a través de patrullaje, luego piden destacamentos fijos, y después solicitan las cámaras de videovigilancia. Para la gente es un elemento clave de necesidad. Y después, en cuarto rango, aparecen los pedidos de las alarmas comunitarias", precisó el edil.
No son nuevas. Desde la Municipalidad, apuntan que en realidad estas instalaciones anunciadas que se están llevando adelante "no son nuevas", son adaptaciones dentro de cámaras que pertenecen a la provincia, y que todavía no se encuentran en funcionamiento. "Se está trabajando sobre el software y luego se comenzará con un período de pruebas, por lo que la puesta en funcionamiento llevaría algunos días más", deslizaron.
De acuerdo a lo que trascendió, la intención que promueve el Ejecutivo es compartir las imágenes con las cámaras de la provincia.
"Se está desarrollando un software que avisará al operador ante cada tipo de infracción, para que transmita una señal y se pueda captar el momento y la imagen de la falta. Todavía está en una etapa de ajustes entre la logística y la parte técnica, por lo que tardará unos días más", comentaron.
Asimismo, remarcaron que no tendrían problemas en realizar las presentaciones que sean necesarias en el Concejo Municipal.