Ciclones extratropicales se abaten sobre el país
Los fenómenos, que no son considerados extraordinarios por los meteorólogos, afectaron esta semana la costa atlántica con intensidad.
18 de septiembre 2016 · 00:00hs
A lo largo del martes y el miércoles pasado un importante temporal de viento afectó a un amplio sector del este del país, incluyendo a las provincias de Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos y a la ciudad Autónoma de Buenos Aires. El fenómeno meteorológico fue particularmente fuerte sobre la Costa Atlántica bonaerense donde se midieron ráfagas de viento del orden de los 100 kilómetros por hota, así como sobre la costa uruguaya la cual se vio afectada por ráfagas superiores a los 120 kilómetros por hora.
La intensidad y persistencia del viento provocó destrozos en especial en el sudeste de la provincia de Buenos Aires, incluyendo la caída de numerosos árboles, de cables de electricidad y de carteles publicitarios. Sobre la franja costera, el intenso oleaje trajo además serios problemas a la navegación y produjo erosión y daños cuantiosos en playas y balnearios.
El responsable del temporal de viento fue un ciclón extratropical típico de estas latitudes. El término "ciclón extratropical" es la denominación técnica que usan los meteorólogos para referirse a los sistemas de baja presión de latitudes medias. Estos ciclones se forman casi a diario frente a las costas argentinas y normalmente tienen un desplazamiento rápido hacia el este alejándose del continente, por lo que sus efectos netos sobre la porción costera suelen ser limitados. Sin embargo, en algunas ocasiones (tal como en los casos mencionados) estos sistemas se desarrollan e intensifican más cerca de la costa. Este ciclón tuvo además la peculiaridad de que se desplazó muy lentamente, dejando un período prolongado con vientos fuertes: la ciudad de Mar del Plata, por ejemplo, experimentó durante 14 horas seguidas ráfagas superiores a 60 kilómetros por hora, y durante 31 horas seguidas vientos mayores a 50 kilómetros por hora.
El hecho de que los mayores vientos se hayan registrado sobre la Costa Atlántica bonaerense y sobre el sur de Uruguay no es extraño: el río de la Plata y el mar Argentino son zonas predilectas para la formación de ciclones extratropicales. Así, es lógico que exista un extenso historial de ciclones que afectaron estas regiones. A modo de ejemplo y solo por mencionar algunos, en los últimos años se formaron ciclones extratropicales costeros intensos durante mayo de 2000 (el cual provocó fuertes lluvias e inundaciones en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires junto a ráfagas de viento cercanas a los 100 kilómetros por hora), en agosto de 2005 (particularmente severo sobre Uruguay, donde ocasionó vientos de más de 150 km/h, extensos daños e incluso víctimas fatales) y en septiembre de 2012.
Se mantendrán. Dado que Argentina país se ubica en latitudes medias, estos sistemas forman parte de su climatología desde siempre y seguirán afectándola en el futuro. La variabilidad climática puede ayudar a que existan años o incluso décadas en que haya mayor o menor frecuencia de formación de ciclones cerca de las costas, pero aún así son y serán un rasgo distintivo de la climatología del centro-este del país.
A mediano plazo, la buena noticia es que estos sistemas intensos ocurren más frecuentemente en otoño, invierno y comienzos de la primavera, por lo cual a medida que se acerca el verano la probabilidad de que un ciclón extratropical intenso como el de los días pasados afecte al país se irá reduciendo. Pero a su vez se ingresa en la época en que aumenta la chance de formación de tormentas fuertes y lluvias abundantes sobre varios sectores del territorio (Cuyo, zona Pampeana, Noroeste, Litoral), así que la recomendación de consultar los pronósticos y estar atentos a posibles emisiones de alertas es siempre válida. La atmósfera está en constante movimiento y por ende las condiciones meteorológicas cambian. El por qué, cómo y cuándo de estos cambios es lo que hace a su estudio tan fascinante.