Las noticias sobre Christina Aguilera parecen ilustrar la imagen de una diva que está perdiendo el control. Así lo indican una serie de traspiés que comenzaron con el fracaso de su último disco y continuaron con las decepcionantes ventas en taquilla de “Burlesque”, su divorcio y su confusión de las letras del himno estadounidense en el Super Bowl, para finalizar con un arresto por ebriedad.
“Fue un año difícil para Christina, no hay otra forma de decirlo”, dijo Keith Caulfield, director asociado de la revista Billboard.
“Siento mucha empatía con estos artistas que terminan bajo la lupa y no son juzgados por lo que hacen sino por cosas como esas”, señaló por su parte Ken Ehrlich, productor de la ceremonia de los Grammy de 2011, en la que Aguilera sufrió un traspié al abandonar el escenario.
Antes de lanzar su disco “Bionic” en junio pasado, la producción estaba dando de qué hablar, pero no precisamente generando buenos comentarios: el video que acompañó a su primer single, “Not Myself Tonight”, provocó que la criticaran por supuestamente copiar el estilo de Lady Gaga. El álbum sólo vendió una fracción de sus otros discos de platino.
Sin embargo, a pesar del arresto que sufrió junto a su novio por su estado de ebriedad, los escándalos de Aguilera no han llegado al nivel de los de Britney Spears, quien se hizo famosa más o menos al mismo tiempo que ella y era parte del Club de Disney junto con Aguilera.
“Muchos artistas tuvieron etapas difíciles y salieron fortalecidos”, dijo Caulfield, quien considera que la cantante debe lanzar un nuevo éxito para detener los comentarios poco favorables.
“A lo mejor lo que necesita es un poco de tiempo libre para organizar sus pensamientos”, señaló.
Alarmas
Gira. Una gira fue dejada de lado en medio de informaciones de que las entradas se estaban vendiendo poco. Aguilera aclaró que la cancelación se debió a que necesitaba más tiempo ara trabajar en la película “Burlesque” que rodó junto a Cher.
Fiasco. En “Burlesque” Christina Aguilera interpreta a una joven que llega a la gran ciudad para triunfar. A pesar del argumento bastante común, la cantante muestra una muy buena performance, aunque no alcanzó para covencer a los fans.
Demanda. Christina Aguilera fue demanda por Tuf America, dueños de los derechos de un canción lanzada en 1968, “Hippy Skippy Moon Strut”, que según argumentan, tiene el mismo ritmo usó en “Ain’t no other man”, del álbum “Back to Basics”.