Quiero referirme al comentario realizado bajo el título "Rosario y su caótico tránsito", publicado en este espacio el domingo pasado. Al respecto, debo manifestar que el autor, asiduo escriba en carta de lectores, realiza en forma reiterada consideraciones y comentarios que revelan una profunda predisposición a criticar la mayoría de las realizaciones del gobierno municipal, alguna de muy buena concepción y otras que merecen crítica. De todas maneras y en lo referente al mencionado artículo quiero expresarle que la puesta en marcha de los carriles exclusivos, y su implementación de acuerdo a comentarios expresados en distintos medios por los gremios de taxis y por las empresas de transporte, fueron definidos como una excelente medida, valorizando los mismos. Además, se menciona entre las críticas las molestias que causa la remodelación de calle Sarmiento, trabajos que no sólo serán para modernizar la arteria, sino que además permitirá el reemplazo entre otras cosas del cableado que data del año 1900, mejoramiento que será para todos los vecinos de la zona. Expresar que el plazo de ejecución de las obras exceden lo normal, es no saber que las obras tienen una duración que no la determinan los vecinos, sino que llevan el tiempo que las circunstancias lo exigen. Para finalizar quiero creer que estas críticas no están salpicadas por la molestia de alguien que es vecino del lugar, y se siente perjudicado por la modernización y por tanto movimiento comercial y bancario.