En tiempos en que la Justicia está en crisis (por mil factores diferentes), la actividad de los peritos debería defenderse en todos los ámbitos, reconociendo la importancia de su actuación en la resolución de causas judiciales. La crisis ha llevado a que, en poco tiempo, se disminuyera la cantidad de peritos judiciales a menos de la mitad, en plena época de aumento de la población y aumento de causas de litigio. Hay profesiones que no tienen ningún perito inscripto, atrasando con esto la resolución de la causa. Por estos motivos, ya seis provincias han regulado esta actividad en reconocimiento a la importancia de estos colaboradores de la Justicia. En Santa Fe hace ya cinco años que los diferentes colegios profesionales venimos trabajando en un proyecto, el cual fuera presentado por el senador Miguel Lifschitz en la Cámara de Senadores, que el año pasado dio su aprobación para pasar a segunda instancia en Diputados. Hace pocos días se han presentado dos nuevos proyectos que también buscan regular la tarea de los peritos. Sin embargo, la urgencia en resolver esta problemática nos dice que se debería dar todo el apoyo al que ya tiene media sanción y así lo han hecho saber 10 colegios profesionales de la provincia. Cualquier otro proyecto superador y con propuestas de mejoras seguramente sería también bien visto por los peritos judiciales. Pero dado que los nuevos llevarán un camino de otros cuatro años, como fue el caso del realizado y en vías de aprobación, lo lógico sería dar curso al tratamiento urgente al proyecto con media sanción, y dejar para más adelante la discusión de las posibles mejoras en el ordenamiento de la actividad de los peritos forenses. Señores diputados, la Justicia no puede esperar, sigamos los pasos de otras provincias y tratemos el proyecto en este año para que no se caiga una vez más.