Los médicos que lo asistieron en las primeras horas después de hallado no se explican la tranquilidad y el buen estado de ánimo del nene que pasó seis días solo en medio de un bosque tras ser abandonado por sus padres a la vera de un camino como sanción disciplinaria por haber tirado piedras a varios automóviles.
Yamato Tanooka, de 7 años, fue encontrado ayer a las 7.30 por un soldado en un campo de entrenamiento militar en un bosque de la isla japonesa de Hokkaido (norte). Había estado todo ese tiempo sin comer, tomando agua de un grifo de las instalaciones castrenses que son usadas esporádicamente en ese campo de entrenamiento, vistiendo apenas un pantalón corto y una remera en una zona infestada de osos y donde la temperatura mínima cae por las noches a cinco grados.
Con siete años venció a la soledad, al hambre y a un castigo paterno que casi acaba en tragedia.
El portavoz de las fuerzas de autodefensa, Manabu Takehara dijo que el chico se tapaba con colchones cuando tenía frío, que estaba un poco deshidratado y que tenía hambre, tanto que el soldado que lo halló en un barracón prefabricado, donde ingresó para guarecerse de la lluvia, le dio dos bollos de arroz y el nene los tragó en un instante.
"Parece estar en buena condición física, pero fue trasladado en helicóptero al hospital", informó Takehara. Las fuerzas militares de Japón habían enviado 70 hombres para sumarse a los 120 bomberos que buscaban al chico.
"El niño ha hecho un gran esfuerzo", explicó el médico que lo atendió, Yoshiyuki Sakai, quien dijo que solo presentaba signos leves de hipotermia y deshidratación así como algunos arañazos en las piernas y manos, por lo que permanecerá internado tres días.
"Se encontraba muy calmado teniendo en cuenta que ha pasado todo este tiempo solo. No se asustó en absoluto", añadió Sakai, que contó que el nene se mostró contento en el reencuentro con su familia.
El chico contó a la policía que llevaba caminando por el bosque desde el sábado, día de su desaparición, hasta que llegó al barracón en un terreno militar situado a 5,5 kilómetros del lugar donde sus padres lo habían dejado.
En las instalaciones donde el nene se guareció había una canilla de agua, lo que le permitió beber regularmente durante su estancia.
Las televisiones mostraron unas imágenes de una habitación oscura con colchones extendidos en el suelo. El nene dijo que se coló entre dos colchones para resguardarse del frío.
"Mi acto excesivo ha forzado a mi hijo a vivir momentos muy difíciles", confesó Takayuki Tanooka (44), con la mirada baja, a la salida del hospital, y pidió disculpas al colegio, a los equipos de salvamento y a todo el mundo "por haber creado todos estos problemas".
"He visto a Yamato. Le he pedido perdón. Ha asentido con la cabeza. Sus labios estaban un poco secos. Es extraordinario que esté sano y salvo. No tengo palabras", dijo entre sollozos.
Los medios japoneses interrumpieron sus emisiones para anunciar el hallazgo con vida del niño perdido, un caso que generó una oleada de críticas anónimas contra los padres en las redes sociales.
El viernes, los comentarios continuaron en Twitter y la gente se mostró asombrada por la capacidad de supervivencia del pequeño Yamato.
"Es un milagro increíble que haya sobrevivido él solo", se sorprendió Ken Noguchi, un famoso alpinista que conquistó el Everest.
Según la policía, el nene, su hermana mayor y sus padres estaban paseando hasta que la pareja perdió la paciencia por el comportamiento de su hijo, que lanzaba piedras a los coches y caminantes.
En el trayecto de vuelta, los padres castigaron a Yamato, lo obligaron a salir del coche y lo dejaron en el borde de la carretera en pleno bosque antes de continuar con su camino, alejándose unos 500 metros.
El chico corrió detrás del auto hasta que lo perdió de vista, entonces decidió internarse en el bosque. Sus padres regresaron para buscarlo pero no lo hallaron. Estuvieron dos horas tratando de dar con él y al no lograrlo llamaron a la policía.
Los padres de Yamato no están bajo ninguna investigación policial por sus acciones.